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El cantautor Carlos Macías no sucumbe cuando se trata de resolver asuntos, ya sean de índole artística, política, de derechos de autor o de contrarrestar los ataques que ha recibido –junto a su familia– por redes sociales, o de adaptarse a los conciertos vía streaming.
“Soy consciente de que no sólo soy un artista, sino que tengo un cargo político (en Chiapa de Corzo), el cual posiblemente deje, porque la libertad de pensamiento, alma y espíritu no tiene ningún precio”.
Acerca de las transmisiones en vivo sostuvo: “La diferencia con los espectáculos en vivo es tremenda. La sensación no es la misma, pero tendremos que adaptarnos a esta nueva modalidad, sobre todo, en mi caso que son conciertos bohemios en los que las personas se toman su copita y cantan conmigo”.
Además, prosiguió, “soy un autor que no sólo canta lo que compongo, sino me gusta rendirle tributo Álvaro Carrillo, Juan Gabriel, Armando Manzanero y Roberto Cantoral. De manera personal, un millón de veces prefiero tener al público frente a mí. Sin embargo, en esta bohemia vamos a traspasar el tema de no tenerlos en vivo, de que la gente disfrute en casa como si estuviera en la sala de conciertos”.
Autodefinido “autor de catálogo”, el compositor chiapaneco se ha mantenido activo y creativo durante la cuarentena por la pandemia de Covid-19.
En este lapso escribió un tema para la abuela de Cristián Castro, Doña Socorro, quien falleció hace poco. Lo grabará a dueto con el cantante en los próximos días; antes había lanzado una canción para animar a la gente en torno al aislamiento social: Quédate en casa.
El cantautor tampoco ha dejado de lado la promoción de su reciente disco Lástima que sean ajenas –en el que rinde tributo a diversos compositores-, y prepara su próximo álbum con canciones inéditas.
“Hace unos días alguien me preguntó sobre quién me gustaría que me grabara… pero se ha muerto esa ilusión”, contó Macías en conferencia virtual en torno a la transmisión del concierto en línea que ofrecerá este 4 de julio a partir de las 21 horas, a través de Eticket, desde La Cueva, de Rodrigo de la Cadena. (iM-rrc)
